
Sordera súbita
La sordera súbita hace referencia a esa pérdida de audición de forma repentina y prácticamente inexplicable.
La pérdida de audición que provoca suele ser de grado medio a severo. El origen de la sordera súbita en la mayoría de los casos se debe a enfermedades infecciosas o autoinmunes, golpes o trastornos vasculares.

Desde mareos hasta escuchar ciertos zumbidos antes de dejar de escuchar nada o una sensación de oído lleno. Estos son algunos de los síntomas más comunes en los pacientes que padecen sordera súbita.
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Para poder tratar esta situación tan compleja en el oído, es necesario un diagnóstico específico y el inicio de un tratamiento farmacológico a base de corticoides concretos.
Al margen de estas dolencias que hemos descrito, las infecciones, las alergias, el tumor de oído o tener el tímpano perforado también pueden ocasionar importantes lesiones en el sistema auditivo de los pacientes que las padecen.